Introducción a la
Política |
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La
Energía dividida La
economía es resultado directo de la necesidad
de coordinar y regular el mundo material, del cual formamos
parte, para acceder a los recursos que en la vida necesitamos
La política,
el intento de organizar las masas humanas desequilibradas
por la codicia.
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para mantenerla mientras ella persista en aflorar su flujo.
Esto es muy sencillo. Pero ocurre que el ego-céntrico
es codicioso, entre otras letales cualidades que sustenta,
y desde ese exclusivo interés propio, se esfuerza por
poseer más de lo que le pertenece, así, otros
quedan sin lo que les corresponde por el mero hecho de estar
vivos. Es entonces cuando para poder "organizar"
las consecuentes tensiones y conflictos que la propiedad
desequilibrada conlleva en relación a la convivencia
conjunta, deban desarrollarse todo un compendio de normas
y reglas, leyes, que delimiten hasta dónde uno
puede llegar en este concierto de poder y dominio que la misma
propiedad material y económica requiere. De aquí
nace la política, el intento de organizar las
masas desequilibradas por la codicia, distribuidas en un campo
psico-jerárquico que el ego-céntrico
promulga, impone, y se aferra perpetuamente a él pretendiendo
encontrar una seguridad que jamás encuentra, a pesar
de que en sus "sueños" él cree encontrarse
seguro. La
Especialización Política Pero esta energía material dividida en forma de "propiedad", que manifiesta las graduaciones de la completa escala jerárquica, no se conforma con limitarse a lo material exclusivamente,
sino que el ego-céntrico incubado
Si nuestros
problemas son "constantes" deberían
dejar de ser problemas.
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en el cerebro se siente realmente "más grande"
como ser humano, psicológicamente, que los que se encuentran
por debajo en ese nivel de posesión desequilibrada.
Es la función primaria de la jerarquía psíquica, "graduarse" en relación a los demás
en cuanto a posesión y poder sobre ellos. Y aún
cuando la mayoría de especializaciones en cuanto a
lo que llamamos "lo profesional" denotan este sentir
de graduación hacia la grandeza, la que de forma más
evidenciada lo manifiesta es la especialización
política. En ella y desde ella la energía
se divide y se subdivide de mil maneras diferentes, pero a
tenor de que nuestros problemas fundamentales parecen ser
"constantes", (lo cual debería dejar de hacerlos
problemas), se ve claro que estas subdivisiones no traen orden
y paz al mundo. Más bien, la jerarquía psíquica nos tiene atrapados en el miedo al futuro, o con un sueño
dorado de ese futuro para ocultar el miedo, con un gran desconocimiento
propio, y de hecho, teniendo que ocultar siempre nuestros
planes para que no vayan a ser desmantelados por otros. Continuas
guerras, continua pobreza y hambre, pero eso sí, con
el anhelo de la grandeza, de ser reconocido, reafirmado y
premiado.
RICO PAR (2 de Julio, 2009)
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El Futuro es Hoy, Krishnamurti. |
Nota RICO PAR:
Centramos nuestra vida en el planteamiento económico
y por ende político, prácticamente acerca
de todo lo relacionado con lo físico. Lo psicológico,
que abriga la relación humana y a su vez la relación
con el todo creacional, que es la vida en sí misma,
lo dejamos en segundo plano como una cuestión de
"religión", de creencia. Sin embargo
la política pretende ordenar la moral y la ética,
y ¿no son éstas auténticas cuestiones
que le atañen a una mente "religiosa"? |
¿Por qué nos
dividimos?
Krishnamurti:
:/
: Antes de que empecemos a discutir, ¿cómo
abordan ustedes un problema? ¿Entienden mi pregunta?
¿Cómo observan una cuestión cualquiera,
un problema? ¿Cómo lo consideran, cómo
se aproximan lo más
posible al problema? No podemos esperar que quien les
habla conteste la pregunta de ustedes, porque en la
pregunta misma puede estar la respuesta. ¿Comprenden?
Por lo tanto, cualquiera que sea la cuestión
que vamos a discutir esta mañana, examinémosla
primero, no esperemos una respuesta. ¿Han entendido
este hecho o es algo misterioso? Tengo
una pregunta para ustedes, no voy a contestarla: ¿Por
qué separan el vivir nuestro vivir cotidiano
de las ideas que tienen de lo espiritual? ¿Por
qué dividen ambas cosas? ¿Por qué
separan lo que llaman vida religiosa, de la monótona,
triste vida de todos los días? Contesten mi
pregunta. Primer
Participante (P1): Porque se necesita una clase
distinta de energía. La vida espiritual y la
vida común, mundana, implican dos especies
diferentes de energía. K: Es decir, dos clases distintas de energía:
una para la llamada vida religiosa, y otra clase de
energía para la vida mundana. Y bien, no voy
a contestar la pregunta. Vamos a averiguar si lo que
usted está diciendo es un hecho. Usted dice que esas personas que son religiosas, que se
ponen encima esas ridículas vestiduras, necesitan
una clase de energía por completo diferente
de la que requiere un hombre que viaja por ahí
y gana dinero o el hombre pobre que vive en una aldea.
¿Por qué divide las dos energías?
¿Puedo formular esa pregunta? La energía
es energía, ¿verdad?, ya sea la energía
eléctrica o la energía solar o la energía
de un río que fluye. ¿Por qué
entonces divide usted la energía? ¿Es
que el hombre con barba, con ropas extrañas,
tiene más energía o él está
tratando de concentrar su energía en un punto
en particular? ¿Comprende, señor? P2: Hay diversas clases de energía: una es
la energía del pensamiento, que puede ser aquietada;
hay otra, la energía del discernimiento, que
no se aquieta, y hay otra aún, la energía
de la mente, que da origen a la compasión y
a otras cosas. K:
Ciertamente no. P2:
¿Perdón, señor? K: Señor, estamos discutiéndolo, no
estoy estableciendo la ley. ¿Le importaría
escuchar? P2:
¿Qué relación hay entre los
tres aspectos de la energía, la del pensamiento,
la del discernimiento, la de la mente? K: Responda usted a eso. P3:
¿Puedo hacerlo, señor? K: ¿Por qué no? Usted tiene el derecho
de contestarle a él. P3: Sólo por comodidad dividimos la energía
en diversos compartimentos. Yo no creo que pueda haber
muchos tipos de energía, La energía sólo
puede ser una.
K:
Sí, yo mismo lo habría razonado así.
Usted ve cómo lo dividimos todo. Dividimos la
energía espiritual, la energía mental,
la energía del discernimiento, la energía
del pensamiento.
P3:
Entonces se vuelve muy complicado.
K: Sé que eso lo complica, ¿no es así?
¿Por qué no ser muy sencillo? La energía
del cuerpo, la energía del sexo, la energía
del pensamiento
todo es energía. Es una sola
cosa; únicamente nosotros la dividimos. ¿Por
qué? Descúbralo, señora, ¿por
qué la dividimos? P4:
Estamos condicionados para dividirla.
K: Sí, señor.
¿Por qué está usted condicionado?
¿Por qué acepta esta división?
India-Pakistán, Rusia-América, ¿por
qué dividimos todo esto? Dígame.
Fragmento de: "Discusión
con los participantes del campamento". 21 de
Noviembre de 1985. Del libro de Krishnamurti: "EL
FUTURO ES HOY, últimas charlas en India".
Título original: "The Future is Now.
(Last Talks in India). Traducción: Armando
Clavier. EDHASA, 1992, Barcelona. |
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Introducción
a la POLÍTICA |
La
política del cúmulo psíquico. Iniciamos la ordenación de los materiales reunidos para
el apunte acerca de lo que denominamos "política". Unas cuantas anotaciones del autor y algunos enlaces
externos con exposiciones, aclaratorias, hechos, propuestas,
nuevas tendencias, y desde luego cómo no, contraposición, debate sin fin, (que no diálogo), y
: etc.
etc. confusión y poco acuerdo conjunto. En
los apuntes que forman este compendio englobado en
"política", se procura poner
de manifiesto lo tratado desde la perspectiva del
cúmulo psíquico, pues a todas
luces esta actividad está surgiendo de él,
cosa a su vez que nos sirve para poder verlo más
de cerca, de forma que podamos comprendiéndolo
desvanecerlo. Indudablemente desmantelar el
cúmulo psíquico construido
celularmente con neuronas y sinapsis en el cerebro.
SI LA JUSTICIA
EXISTE,
HA DE SER PARA TODOS, SINO NO ES JUSTICIA.
Foto: 2005.
(Pintada texto en catalán traducido
aquí al castellano)
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Véanse aquí, a la par, las limitaciones
del que escribe que sus notas denotan, que parecen
existir a tenor de echarle un previo vistazo por encima
en este momento de comenzar a ordenar tan variopintos
materiales. Limitaciones que se ven más acentuadas
al encarar este problema, porque lo es, "la
política". Política ¿auto-protección?
Hemos de subrayar aquí,
algo que afecta a toda esta reunión de apuntes,
pero que en este concretamente, al hablar de política,
que saldrán afecciones muy asimiladas por
el cerebro como "auténticas cosas
irrevocables", se hace más necesario.
Con nuestro discurso pudiera parecerle al lector que
estamos apuntando a hacer "bandos", y muy
posiblemente si esto ocurriera será a causa de
no utilizar bien el lenguaje y la expresión por
parte del que ahora escribe. Pudiera aparentar que estamos
tomando partido en uno u otro sentido contra alguien
o algún grupo y por ello colocándonos
en un grupo opuesto. Nada más lejos, pues nos
centraremos en hacer una lectura-exposición,
desde la perspectiva del ser humano completo,
tomando cualquiera de las subdivisiones que irán
apareciendo como parte del movimiento conjunto, y el
aquí señalarlas no es más que poner
de manifiesto algo que cualquiera puede ver cuando le
presta atención a todo este asunto: "la
división social". Las dificultades surgen
cuando pretendemos comprender nuestra organización
económica y a la sazón política,
desde la perspectiva exclusiva de nuestros intereses
particulares, que sin dudarlo provienen de la
auto-protección del cúmulo psíquico.
Sirva esto de experimento para el lector, a descubrir
cómo se inmiscuye en la lectura, sus propias
valoraciones de todo lo que aquí se irá
desplegando.
El trabajo de campo, la vida misma.
Precisamos organización,
es indudable. Pero no desde el papel, aunque
no dejemos de utilizarlo para los números
y los cálculos, sino que lo que necesitamos,
es hacer todos el "trabajo de campo".
Esto significa conocer de forma directa a los seres
humanos y los problemas funcionales con los que
han de hacer frente, y no a través de amorfas
formas idealizadas que por muy ajustadas generalmente
al final se distancian en cierto grado de sus propias
presunciones. En esa escala jerárquica,
en la que organizamos nuestra vida económica
y política, pero más profundamente
nuestra interrelación psicosocial,
son muchos los que no pueden hacer, (en algunos
casos ya les está bien así), el trabajo
de campo, ya sea tanto ascendiendo como descendiendo
en la escalada de la jerarquía psíquica.
Un ejemplo sencillo: el que diseña y organiza
un comedor municipal, jamás va a él
a comer como si fuera un usuario más del
"servicio-regalo". ¿Más
crudamente? El que ejerce poder, si se acerca alguna
vez al débil las cámaras están
ahí, para prodigar su benévolo desprendimiento,
con una simple caricia cumple su misión pública.
El desvalido continúa en su estrangulación
cuando él se va, y jamás puede llegar,
si le apeteciera por cualquier motivo, hasta el
que más arriba está. Ninguno de los
dos hace su trabajo de campo, llegar hasta
donde el otro se encuentra, entrar en comunión,
y entonces, lo que cada uno tiene en su mente es
una imagen del otro desde la perspectiva que cada
uno siente, pero mucho desconocimiento real del
otro.
Temis del Templo de Némesis en Ramnonte (Ática),
firmada por el escultor Cairestratos, c. 300
a. C.
(Fuente: WikipediA)
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El
orden piramidal de la jerarquía psíquica
Una de las palabras más feas, con su sintomático
significado, es "gobierno",
o el acto de gobernar. Hubo un tiempo
que se intentaba utilizar una palabra con mayor realidad
y verdad, "administración",
de recursos, de bienes y de educación. Tal
vez "dirección" también
sería correcta, pues significa: "apuntar"
el camino a seguir. Pero parece que a muchos les es
más de su agrado la primera. Desde luego gobernar requiere mandato y acatación, y para administrar se precisa inteligencia, orden y equidad. Los gobiernos que organizan el mundo, pertenecientes en su mayoría
a lo que llamamos "países democráticos",
tienen un gobierno elegido por una "parte"
del pueblo, sin embargo precisan de un estamento policial,
para cuando el pueblo no está de acuerdo en
la acción que se está llevando a cabo
en el acto de gobernar y han perdido la paciencia
de esperar. ¿No fueron ellos elegidos por el
mismo pueblo asumiendo que les otorgaban su confianza?
¿O simplemente los eligieron por meras y superficiales
ideas propagandísticas, quedando decepcionados
luego? ¿Qué aberración es esa
del "voto de castigo"? Las
clases pobres, siguen viviendo en la estrangulación
en la que siempre han vivido sea cual fuere el partido
que accede a dirigir la organización. Y cuando
cualquiera se encuentra en las clases productoras,
aún su acceso al consumo, al entretenimiento
y al placer, no dejan de quejarse nunca de que han
de estar siempre produciendo, con poco tiempo de asueto,
y envidiando a las clases altas, las cuales por regla
general lo único que encuentran mal, es tener
que lidiar de continuo el concierto-desconcierto que
supone mantener el orden piramidal que
la jerarquía psíquica
proyecta. Administración
versus gobierno Esta
pirámide psico-jerárquica
que el espejismo de centricidad impuso desde mucho
tiempo atrás, tomándolo el cerebro como
una realidad, se circunscribe exteriormente exclusivamente
en los aspectos físicos del ser humano, y ella,
con sus escalafones humanos predeterminados, manifiesta
grandes diferencias, de acceso a las necesidades primarias
y a los recursos generales. Pero en el interior del
cerebro, en la psique humana, el espejismo
de centricidad es común, se encuentra
operando su efecto en el cerebro en cualquier escalafón
al que apuntemos, y las desbordantes diferencias físicas
que existen entre escalafones, reales en cuanto a
carencias y despilfarro, en verdad provienen de una
mera ilusión, el ego-céntrico y su jerarquía psíquica,
a pesar de que tal ilusión genere tanto sufrimiento
físico, pero sobre todo en la mente del ser
humano. Y cuando uno lo mira, no es de extrañar,
que sea precisamente una ilusión
lo que produce conflicto y oposición, miedo
y desorden. La escala piramidal de la
jerarquía psíquica, se
encuentra completa en cualquiera, sea cual fuere el
escalafón que de esa escala se esté
ocupando. No en vano, la jerarquía psíquica es un resultado directo del cúmulo psíquico,
proyectando la sensación de ego-céntrico, el espejismo de centricidad. Y de esta terrible y
morbosa afección, por desgracia, son pocos
todavía los que comienzan a descubrirse libres
de ella, o aprendiendo en el acto vivo a disolverla.
Themis,
la diosa de la Justicia
Themis,
que significa "Ley de la Naturaleza"
más que "autoridad humana".
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JUAN
LISCANO: Por lo tanto, la indagación krishnamurtiana
no tiene por objeto proceder a un despojamiento interior
para alcanzar finalmente un bien que compense lo que
se dejó en ruta. No se trata de un negocio,
de cambiar lo viejo y gastado por lo nuevo. Tan sólo
en la medida en que se excluya de esta búsqueda
todo sentimiento de ganancia y acumulación,
de provecho, de compensación, es como se logrará
un acercamiento hacia el posible y muy contadas veces
realizable despertar. Y todo discurso en torno a esta
indagación no puede resultar sino un esfuerzo
dialéctico formulado a través de ideas
para inducir a quien lo escuche, a sobrepasarlas,
a agotar el discurso para entrar, finalmente, en el
silencio interior. De modo que para quien despierta,
para quien accede al estado de liberación psicológica y de comprensión totalizadora del mundo, sobrarán
siempre estas palabras que escribo, como las que escribió
Armando Clavier o pronunció el propio
Krishnamurti. Y es muy probable, que desde
esa iluminación serena, ese alto estado de
conciencia, no habrá antagonismo alguno entre
ese ser que es y la política. La polémica
tiene sentido solamente en una etapa primera de toma
de conciencia de la crisis y del sufrimiento humano,
de comprobación de nuestra propia ignorancia,
de nuestros engaños y enmascaramientos, de
la mentira y la falsedad de acciones que por las más
diversas vertientes no tienen otra función
que reforzar la avidez acumulativa del "yo",
de la angustia imperante como fruto del desarrollo
material y de la gama variadísima de neurosis
y fobias a que aquella da lugar.
:/
Cada
vez resulta más difícil soportar la
vida social, los constreñimientos a que obligan
la gran producción y la gran población,
el terror ante la perspectiva de una guerra nuclear.
El hombre de esta era se caracteriza por la angustia
y el miedo. Mientras se abre ante nosotros el espacio
cósmico, se entenebrece más y más
la psiquis y se anquilosa más y más
la vitalidad. Y las experiencias habidas mueven a
dudar sobre los efectos sanadores de las panaceas
políticas (y religiosas). Como lo señala
Wilhelm Reich, el psiquiatra visionario que
persiguieron en una misma hazaña de oscurantismo
los stalinistas y el establecimiento capitalista norteamericano:
"No
habrá paz en la tierra mientras los
dirigentes políticos
continúen dirigiendo masas de individuos
neuróticos".
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Fragmento
procedente del Prólogo de Juan Liscano, (Caracas -
Venezuela), del libro "PRESENCIA
DE KRISHNAMURTI". Diálogo con un joven
estudiante, de Armado
Clavier. Editorial
Kier, S.A. Buenos Aires 1971.
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