CONCIENCIA |
|
Artículo 6 de 8 |
Conciencia, "darse cuenta". |
|
Necesidad por carencia
Toda necesidad es una carencia.
No necesitamos aquello que ya tenemos, únicamente necesitamos
aquello de lo que carecemos. Precisamos alimentarnos, cuando
las células ya no
Sólo
en la paz el ser humano puede ser libre
Krishnamurti
hablando en
Brockwood Park en 1983.
|
tienen más proteínas y calorías para
mantenerse vivas. Por eso existe un cierto período
de tiempo que no carecemos de alimento, mientras las células
lo están consumiendo. Inspiramos oxígeno cuando
tenemos los pulmones vacíos, cuando hay carencia. Al
organismo le ocurre lo mismo con el calor, lo precisamos interiormente,
pero el medio ambiente también debe mantenerse dentro
de unos márgenes, de lo contrario el organismo sólo
no puede producirlo. En el ecuador nos sobraría calor,
en los polos, nos faltaría. Éstos son meros
ejemplos en el ámbito biológico, para mostrar
que sin carencia no existe la necesidad. Entonces, llevada
la necesidad al plano psíquico, nos hemos de preguntar,
¿de qué carece la psique? Tal como ahora entendemos
el movimiento psíquico, sujeto a los requerimientos
del ego-céntrico, es evidente de que éste es
meramente un movimiento mecánico de continua búsqueda
del placer, y continua evitación del dolor. No en bano,
el ego-céntrico es hedonista por "naturaleza",
entonces, la necesidad y la carencia proyectadas por el cúmulo
psíquico, no son algo real en el ahora vivo, sino que
provienen de recuerdos y del acto volitivo del ego-céntrico,
de su capricho. Interferida así la psique por el pasado
emocional retenido, impide el despertar de la conciencia,
que es la única que puede realmente darse cuenta de
cuál es la fundamental necesidad que la psique requiere
proveniente de lo que ahora carece.
RICO PAR (5 del 12 del 09)
|
|
|
|
|
La
PAZ más profunda
Krishnamurti: Sin
gurú. Diálogo sin gurús.
Rubén: ¿Podríamos
decir que usted está siendo mi gurú
sin que lo queramos y que yo estoy siendo su gurú
sin que sea mi propósito?
Krishnamurti: Entonces
hay un diálogo serio. Usted y yo estamos
viendo juntos la misma cosa al mismo tiempo. La
cosa más repugnante es postrarse ante otro
ser humano y adorarlo.
/
Rubén: San
Pablo dijo: Yo muero cada día.
Krishnamurti: Pablo
dijo yo muero cada día y el
Dr. González repite lo que dijo
Pablo y nada sucede.
/
Después de desatar
una tormenta, Krishnamurti era capaz de
contagiar la paz más profunda y más
exaltada.
Del
epígrafe "DE MARZO 25, 1975",
(Hotel Huntington, San Francisco, California),
del libro "MIS DIÁLOGOS CON
J. KRISHNAMURTI 1975 - 1986", por Rubén
Feldman, 1999.
Visitar libro en formato .zip en
la Biblioteca de UPASIKA. | | | | |
|
|
|
|
|
Paz y Silencio
|
¿Hay conciencia
en la parte?
La conciencia, el estado
del cerebro que se da cuenta. ¿Se da cuenta el
intelecto, el pensamiento? ¿O existe un estado
del cerebro que va mucho más allá de ellos?
El darse cuenta debe ser una captación de lo
total. Si hay una "parte" mirando, el pensamiento
haciendo de filtro, él mismo reticula la realidad,
y
Fundación
Krishnamurti Latinoamérica
"Darse cuenta".
La Atención.
|
entonces, la ve a trozos, no puede verla completa. Así,
a través de ese filtro, el darse cuenta no existe.
Filtrando la percepción a través del pensamiento,
sólo nos damos cuenta de una parte, que por serlo,
ya es en sí misma muy mengua, por grande que
nos parezca, pues cualquier parte, siempre delimitada,
se convierte en algo muy pequeño frente a la
totalidad que no tiene limitación alguna. Esto
que declaramos, además de ser un principio lógico-matemático,
es un hecho irrefutable sea cual fuere el lenguaje que
utilizáramos para expresarlo. Pero si el cerebro
le presta atención sin ideación ninguna,
ve la verdad intrínseca que ese hecho significa,
sin necesidad de ponerlo en palabras. Pero no nos hemos
de preguntar cual es la manera de "situar"
al cerebro en ese estado de conciencia libre de toda
limitación, sino que más bien nos hemos
de preguntar por qué ahora el cerebro está
atrapado en la parte sin acceder a su innata cualidad
de conciencia holística, que es a todas luces
como se encuentra a nivel material el cerebro, interrelacionado
con el todo. Cosa que le debería ocurrir igualmente
a la psique, en la cual entonces se despertaría
la conciencia sin límites ahora dormida. Es la
comprensión de la interferencia que ahora ocurre
entre cerebro y mente lo que hace despertar la conciencia,
y mientras esta interferencia esté reestimulándose
de continuo, la comprensión no puede abrirse
paso en ese incesante ruido. ¿Qué precisamos
para encarar esta confusión en la que ahora el
cerebro ha quedado atrapado creyendo que ella es la
esencia de la vida?
"Ingredientes sin
receta"
Cuando vemos claramente
que no existe receta ninguna para "llevar"
al cerebro al estado de atención completa, que
es de la única acción que el cerebro puede
ponerse en modo de "darse cuenta", es cuando
dejamos de buscar un método, una práctica,
un sistema para colocarnos en tal estado, y como Krishnamurti
señalaba, únicamente podemos prestar atención
a nuestra inatención. Dándonos cuenta
de nuestra inatención, tal vez podamos desde
ahí descubrir los ingredientes que sí
se precisan para que la conciencia despierte, pues ellos
mismos son ya el estado de atención que requerimos.
Tales cualidades son sin dudarlo, la PAZ y el SILENCIO,
fáciles de nombrar, pero extremadamente arduas
de "hacerlas" discurrir en el cerebro por
un lado, y por otro de tener un atisbo de lo que verdaderamente
significan. Ambas, proporcionan la atención que
se requiere para despertar la conciencia. La paz no
es lo que corrientemente la mayoría imagina,
un estado cándido, de ensoñación
placentera en la que "uno" no es perturbado.
Eso se puede conseguir momentáneamente con ciertas
plantas o drogas, incluso con técnicas físicas
o de autosugestión, y más tarde o más
temprano la discordia termina por imponerse. Cualquiera
puede comprobar esto. La paz ocurre cuando el cerebro
es capaz de fluir con el ahora vivo, con todos sus aconteceres,
sin quedarse retenido y menos identificado con los acontecimientos.
Fluyendo en ellos de manera completa pero sin echar
ancla ninguna. Eso es lo arduo, pues el ego-céntrico
siempre se está aferrando a todo suceso cargando
con los residuos que el acontecer deja. En la paz hay
creatividad total y destrucción completa. Creatividad
pues lo nuevo se manifiesta sin ser impedido, y destrucción
porque todo muere para permitir que lo nuevo ocurra.
Vida-muerte sin idealización ninguna. Si el cerebro
puede discurrir en la captación sin intelecto
ni pensamiento emocional, la paz acontece por sí
sola. Es en la paz que podemos comenzar a comprender
qué es el silencio y su relación con el
flujo creacional borboteante. De ahí que la paz
sea un ingrediente fundamental para despertar la conciencia.
|
|
|
|
|
La
conciencia reticulada. |
Conciencia más allá
del intelecto
Y ciertamente, nos encontramos
aquí entregados a procurar desplegar lo que la
conciencia es, o al menos apuntar aunque sólo
sea vagamente a lo que esa palabra se refiere, frente
a lo que ya llevamos señalado en las páginas
anteriores, además de una buena colección
de archivos de variados autores, estudiosos de temas
relacionados con la conciencia desde diferentes perspectivas
epistemológicas y ontológicas. Salvo algunas
especiales excepciones, la mayoría de ellos considerando
que tal cualidad emergente en el cerebro la podemos
no sólo explicar sino que también definir
a través del pensamiento y su conocimiento. Y
sentimos decirlo, pero dejándonos llevar por
las lecturas, encontramos como una onda a modo sinusoidal
que fuera desplazándose desde lo claro a lo confuso,
y viceversa, sin nunca llegar a algún entendimiento
real que saque al cerebro de encontrarse atrapado al
pensamiento para poder tener una "vivencia"
de lo que es la conciencia más allá de
ese delimitado campo. Es fácil en ciertos momentos
despertar una sensación de "bajo nivel"
de aprehensión de la verdad. Después de
recorrer y recorrer todos esos materiales de pensamiento-conocimiento
puestos en textos, continuamos sintiéndonos confusos.
O bien no utilizamos adecuadamente las palabras, o ellas
son tan "polifacéticas" que al apuntar
a tan variados contextos interrelacionados hacen que
al pensamiento no le sea posible acceder a algún
cuadro completo y claro que deje al cerebro tranquilo
para poder observar mucho más a fondo en la creatividad
bullente del propio acontecer vivo. Lo sabemos, paciente
y afectuoso lector, lo que aquí se escribe puede
en igual medida sino más parecer lo auténticamente
"raro". Sin embargo, aún lo bello pero
sobre todo divertido que es "axiomatizar"
el propio conocimiento, el potencial del cerebro es
algo mucho más grande, que no el del mero intelecto
ordenando teorías por muy exigente y audaz que
él se muestre.
De nuevo, la ineludible
limitación del pensamiento.
Según lo que explican los
antropólogos en cierto momento apareció
el habla al tiempo que la creación de herramientas
y la organización del grupo. Facetas, como ahora
sabemos, relacionadas con el pensamiento el cual es
utilizado por el intelecto. Todo ello comenzó
a surgir de manera espontánea, aunque en cierta
forma la naturaleza
|
|
|
|
Cambiar la
estructura
molecular del cerebro
Krishnamurti:
¿Habló usted con
Bohm?
Rubén:
Sí. El lugar era pequeño
pero la conversación era
grande. El Dr. Bohm fue lo
suficientemente paciente para escuchar
todo lo que tenía que decir.
Dijo que mi acercamiento a la percepción
podría ser de mucha ayuda
para aquellos que tienen mente para
escuchar. Estoy tratando de pulir
el lenguaje hasta donde sea posible.
Krishnamurti:
Eso es bueno, pero las palabras
tienen que ser simples. Algunas
veces he sentido ganas de crear
un nuevo lenguaje. Pero uno tiene
que hablar a aquellos que escuchan
y uno tiene que usar las palabras
que tenemos.
Rubén:
El Dr. Bohm estuvo de acuerdo
conmigo en que cualquiera que escuche
en percepción unitaria (audición
Holokinética si usted quiere)
cambiará la estructura molecular
del cerebro, de cada neurona.
Krishnamurti:
Cierto, cierto.
Del epígrafe
"BROCKWOOD PARK (Junio
1978), del libro de Rubén
Feldman, 1999.,
"MIS DIÁLOGOS
CON J. KRISHNAMURTI
1975 - 1986".
| | | |
|
|
|
|
ya lo iba preparando, (es una manera de expresarlo),
mas el hecho de que éstas cualidades conjuntas
e interrelacionadas se produjeran no fue ni mucho menos
propia decisión volitiva del "pre-animal"
humano, sino que es obvio que el propio flujo creacional
ya las contemplaba contribuyendo a que fueran surgiendo.
Pero obsérvese, además de esta indecidibilidad
del ser humano para desarrollar el pensamiento con sus
lenguajes, el hecho es que emergieron a partir de necesidades
prácticas de la vida "doméstica"
y cotidiana, y no con el fin de comprender profundas
verdades creacionales. Pero ocurrió entonces
que en poco tiempo, como esas habilidades cerebrales
y manuales requieren un cierto grado de conciencia,
de "darse cuenta", esos primeros humanos comenzaron
a preguntarse acerca de la transitoriedad de las cosas,
lo veían no sólo con los otros animales
que mataban para alimentarse, sino que sobre todo también
lo veían en ellos mismos, de una forma u otra
terminaban muriendo. Y ahí comenzaron los ritos
mitológicos de un cerebro despertando en las
tinieblas. Se iniciaron las ceremonias funerarias y
las creencias explicativas del gran misterio que se
les abría por delante, la inmensidad de la vida,
y la profunda e ineludible muerte. De hecho, teniendo
ellos el énfasis puesto en la supervivencia,
pareciera natural que les diera pavor la muerte, e inventaran
las mil y una explicaciones, inconscientes de que jamás
podrían con el pensamiento explicar algo que
iba muchísimo más allá de lo que
el pensamiento puede contemplar.
Todavía vivimos asustados
Nosotros ahora, después
de un largo período de generaciones y sobre todo
con un muy buen caudal de conocimiento, intelección
y pensamiento, hemos desarrollado una tecnología
que se hace abrumadora incluso para nosotros mismos,
pues a todas luces no sabemos bien cómo ordenarla.
Los desequilibrios ecológicos que hemos generado
dan clara noción de esto. Sin embargo vivimos
con el mismo miedo que aquellos primitivos seres humanos,
pero peor que eso, miedo que en buena parte es causa
de cómo nos relacionamos. Véase aquí
la mera limitación del conocimiento a un área
muy restringida. Pues éste, aún con lo
desbordante que lo tenemos recolectado, no nos ha liberado
de esa nefasta cualidad de vivir asustados. Obviamente,
si nos encontráramos felices y tranquilos, discurriendo
en la creatividad, no tendríamos los problemas
relacionales que tenemos. Y es aquí donde se
pone de relieve que el conocimiento, el intelecto es
incapaz de comprender en qué consiste la psique,
la mente, y la esencia o sentido de ser un ser humano.
A lo más que hemos llegado es a disimular ese
temor que nos embarga, pero no a comprenderlo. Esto
es obvio por sí mismo y la propia lógica
lo pone de manifiesto, aunque no es necesario recurrir
a ella, ya que el cúmulo psíquico devaneándose
en su devenir hacia la "permanencia imposible"
lo pone de relieve. El intelecto es una mera función
del cerebro, pero
¿es ese su único
potencial? Frente al hecho de ser el cerebro humano
uno de los órganos más complejos que el
flujo creacional ha generado, ¿se debe quedar
reducido únicamente al área del limitado
conocimiento? ¿Qué ocurre con la creacionalidad
implícita y explícita en la creación?
¿No podemos discurrir en ella? ¿Tiene
acceso el cerebro a sintonizar con la primigenia fuente
de todo este indescriptible acontecimiento, el flujo
creacional? Llevamos aquí un buen montón
de tiempo. A las otras especies las hemos doblegado
sino es que las hemos aniquilado, y todavía no
sabemos qué pueden opinar ellas acerca de todo
este acontecimiento, la creación. Únicamente
porque todavía discurren en la inocencia pura,
creemos que no tienen nada que decir al respecto. Pero
la verdad es que sabemos cómo condicionarlas
y explotarlas, pero no
Composición con graffiti
urbano anónimo e imágenes electrónicas.
|
sabemos comprenderlas. Claro que esto no ha de extrañarnos,
pues tampoco nos entendemos entre nosotros. Precisamente
a raíz del pensamiento tenemos grandes dificultades
para lograrlo. Aunque sobre todo, a causa del espejismo
de centricidad operante que nos domina.
La conciencia articulada
Véase cómo hemos
caricaturizado a eso que llamamos conciencia: en primer
lugar la hemos "articulizado", la denominamos
"la" conciencia, casi, como si tuviera autonomía
propia. La dualidad substancial a todo pensamiento,
de la que el intelecto no puede escabullirse, ha impregnado
la conciencia, de la que decimos es una voz interna
que nos apunta lo que está bien hecho así
como lo que está mal hecho. También la
hemos dividido en conciencia particular y colectiva.
Y aún más, la creemos programable, hablamos
de "concienciación" que significa modelar
la conciencia. ¿No es la conciencia "darse
cuenta"? ¿Hasta dónde estamos dándonos
cuenta? ¿De qué nos damos cuenta? El "remordimiento"
siempre es de conciencia. O sea, que hay muchos que
se la pasan por alto, la conciencia, pues no sufren
de remordimientos. Matar, para comer o cobrar el sueldo,
incluso más todavía, por gusto o entretenimiento,
está contemplado por la conciencia colectiva,
esto es un hecho, y las justificaciones son muy esmeradas.
Aunque sea la matanza animal la única que socialmente
está permitida y la matanza humana se deje para
las guerras, prohibiendo la matanza personal, de "capricho"
propio. Toda matanza es un capricho, desde luego. Lo
cual significa, en el caso de la conciencia colectiva,
que la conciencia particular está impregnada
de ello aunque no sienta a la colectiva como algo de
sí misma. Ya que
¿hablamos de una conciencia
que es compartida por todos los cerebros, como el Sol,
el aire o el Universo, o decimos que cada cerebro tiene
su particular conciencia separada, que se pone en el
modo de otras conciencias o discrepa de ellas? El nodo-anímico
vibra en la totalidad, por lo cual debe tener acceso
a la conciencia total, más allá de lo
que el cerebro humano pueda estar conteniendo. Sin embargo,
el ego-céntrico, descendiente imperfecto e imaginativo
del intelecto, dice que la conciencia es suya, y la
separación que el mismo ego-céntrico experimenta,
toma potencia en la conciencia, la cual percibe la separación
tan real como el cerebro-organismo siente el sol, el
calor o el alimento. Es en la conciencia donde está
teniendo lugar el espejismo de centricidad, quedando
ella escindida de la totalidad, y por esto, dejando
de ser conciencia.
|
|
|
|
El
lugar Sagrado
Le pregunté porqué tenía
que esperar a que él muriera para conversar de ese diálogo.
Me dijo: Porque estoy hablando de algo dentro de ti, adonde
tú no quieres ir, adonde nadie quiere ir. Si empujas a la
gente a ese lugar sagrado de sí mismos, se pondrán
contra ti. Si te vas a dormir esta noche sin ir hasta ahí,
cuando te despiertes mañana, estarás donde la humanidad
ha permanecido en los últimos tres millones de años.
Dímelo más claramente le rogué.
Sólo el cinco por ciento de tu cerebro está
activo. Si te dijera lo que ocurre cuando despierta el otro noventa
y cinco por ciento, no me creerías. Quizá ni siquiera
volverías a dirigirme la palabra.
Necesité unos diez minutos de silencio para recobrarme de
eso, porque yo adivinaba la verdad que se ocultaba en la dura intensidad
de las palabras de Krishnamurti.
Del epígrafe "FRAGMENTOS DE LA CONVERSACIÓN CONFIDENCIAL",
del libro "MIS DIÁLOGOS
CON J. KRISHNAMURTI 1975 - 1986",
por Rubén Feldman.
Visitar libro en formato .zip en la Biblioteca de
UPASIKA. | |
|
|
|
|
|
|
| |
| |
|
|
|
|
|
"Curación",
liberación y silencio. |
Silencio y liberación No podemos eximirnos de hablar, (escribir) aquí, acerca del silencio, e indudablemente
algo que está muy relacionado con él,
la liberación. El que escribe ha de ser muy honesto
y decir que aún teniendo muy claro lo que liberación
significa, fácilmente al ver lo atrapado que
uno se encuentra a la mecanicidad psíquica, no
ocurre lo mismo con el silencio, pues este sagrado (sano)
estado de la mente, no puede imaginarse, y mientras
uno diga "conozco el silencio", lejos está
de percibir y discurrir en ese sutilísimo "perfume".
Algunos se refieren a él como el silencio absoluto.
El silencio está siempre "aquí",
es como la nada, nunca ha desaparecido ya que jamás
vino, la totalidad emerge de él. También
podemos denominarlo "lo eterno", todas son
palabras que apuntan a la misma esencia, pero ninguna
idea ni sentimiento que no sea auténticamente
puro, puede dar noción de ello. Es la mente que
se da cuenta que se encuentra en el ruido, que se adhiere
a él identificándose, la que entonces
precisa averiguar si existe un estado de ella en la
que no suceda la interferencia de lo mecánico,
aunque sin embargo la borboteante creación discurra
en la mente manifestando las infinitas interrelaciones
configuracionales; un darse cuenta de la belleza creacional
que hay en el fluir de la
Sólo
en la paz el ser
humano puede ser libre
Extracto
de vídeo pertenece a la serie
"El mundo de la Paz"
Porque sólo
en la paz una flor puede florecer. Sólo
en la paz la mente humana, el cerebro humano
puede, realmente, ser libre. Y ¿por qué
el hombre que tanto ha aprendido, que ha adquirido
un conocimiento tan extraordinario, experiencia,
por qué no puede vivir en paz?
Brockwood Park en 1983.
|
mente sin retención ni posesión ninguna.
La mayoría únicamente podemos hablar del
silencio encapsulado en el ruido. Es el silencio dentro
del tiempo, un mero intervalo entre dos acontecimientos,
del cual sí podemos hablar pues está impregnado
de "palabra", lo que lo hace un falso silencio.
El "verdadero" silencio, que de manera impersonal
intuimos está ahí y ha estado siempre,
como es evidente no puede ser retenido ni explicado,
entonces deberemos dialogar sobre ello más adelante,
cuando "avancemos" en la comprensión
de lo que ahora atrapa al cerebro y distorsiona la mente,
el ego-céntrico que ha ocupado el cerebro y lo
tiene dominado. Puesto que mientras no resolvamos esto,
no podremos hablar de lo que es el Silencio.
Liberación, nunca salvación.
Mucha gente habla de salvación, y ésta
es una palabra muy fea en este "contexto"
en el que nos estamos moviendo, en procura de "sincronizarnos"
con la totalidad fluyente, y sintonizar con "el
silencio". Eso que otros llaman "salvación"
proviene del ancestral y primitivo miedo, y más
adelante de la "culpa" impuesta por ese mismo
miedo. De hecho, creencia y mito, y no hay ni ápice
de despectivismo en esta declaración al referirnos
a los que la promulgan, aunque sí un intento
de que escuchen lo próximo que se va a referir
acerca de ello. Si la creación, misteriosa y
desconocida, "incapturable", configura un
ser que puede "darse cuenta", despertar la
conciencia, pero previamente le inocula distorsión,
maldad y ser imperfecto, para entonces a causa de eso
tener que "ser salvado", pareciera una aberración
primigenia, ya que desde cualquier perspectiva no hay
racionalidad posible. Si en la creación todo
tiene su orden, relacionado con el resto de órdenes,
podemos ver que ella no configura para el sufrimiento,
a pesar de que lo físico, que se desgasta, implique
un cierto dolor, pero el auténtico sufrimiento
es la psique padeciendo. Si prestamos atención
más allá de nosotros mismos, podemos percibir
el propósito creacional para el goce de la gloria
interrelacional que desborda la mente. Esta indescriptible
creacionalidad en la que todo discurre en la interrelacionalidad,
aprendiendo, muriendo en lo viejo y naciendo en lo nuevo,
transformándose en algo que "antes"
no fue, manifiesta un despertar, el cual, en el ser
humano se nos revela como la conciencia, el "darse
cuenta". Ahora bien, si el cerebro se encuentra
anclado en la retención de los sucesos que mueren,
que como todas las cosas deberían diluirse dejando
de operar en absoluto, pero ellos ahora se están
proyectando continuamente desde el cúmulo psíquico
en el que se encuentran retenidos, creando el espejismo
de centricidad del que se sucede el ego-céntrico,
la sensación "yo-soy", una pequeña
parte, pero tan concentrada acumulativamente que se
hace muy potente, esclavizando al cerebro y distorsionando
la mente, se hace evidente que lo que verdaderamente
precisamos es "liberarnos" de tal error psicofisiológico
que tiene ahora a la especie humana "infectada".
Esto es un acto de liberación y curación.
Únicamente en el sentido de "sanar"
podemos referirnos a "salvar", pues el que
enferma sin curar termina muriendo, y el que sana ha
sido salvado de la enfermedad, aunque igualmente terminará
por morir, pero habiendo fluido en el orden natural
si lo hace de forma sana. Y siendo una enfermedad el
estado del cerebro "construyendo" el cúmulo
psíquico, para la cual no existen ni medicamentos
ni fórmulas, ni magias ni técnicas que
la puedan desembarazar de esa dolorosa carga sin sentido
alguno, deba ser el nodo-anímico que debe despertar
a la profunda atención que le revele el completo
rompecabezas para así "liberarse" de
su influjo. Un acto de responsabilidad en la libertad,
ambas cualidades imprescindibles para que pueda realizarse
tal "trabajo curativo".
|
|
|
|
Hogar sin
pesar
Krishnamurti:
Yo veo las noticias algunas veces, o alguien
me las resume. El estado espiritual de la
humanidad es deplorable. ¿No ve usted
qué tan urgente y necesaria es su
propia transformación, Dr. González?
Cada niño
debería viajar alrededor del mundo.
Entonces podrían llorar por toda
la humanidad y dejarían de pensar
como argentinos, hindúes, rusos,
americanos, japoneses, etc.
Rubén:
Nada parece ser suficiente para entender
algo tan simple.
Krishnamurti:
Su propia transformación psicológica
total es suficiente. Es suficiente deshacerse
de la conciencia de la humanidad. Es necesario
hacerlo y eso es el silencio puro y la paz
pura del cerebro. Pero eso no puede ser
dejado para mañana, si uno es serio.
Rubén:
Silencio sin nombre.
Krishnamurti:
Es como una casa que no tiene un lugar para
el silencio
será una casa con
mucha actividad, mucho ruido, pero ahí
"Aquello" no entrará.
Tiene que haber un cuarto en cada casa donde
la única cosa que usted pueda hacer
sea estar en silencio y nada más.
Ese cuarto será la flama del hogar.
Rubén:
Entonces cada hogar será como un
templo.
Krishnamurti:
Cada hogar será un hogar sin pesar,
ese es un buen hogar.
|
Del epígrafe
DE OJAI - CALIFORNIA Marzo 30, 1980
- Puede haber un día de error
en esta fecha - del libro "MIS
DIÁLOGOS CON J. KRISHNAMURTI
1975 - 1986", por Rubén
Feldman.
Visitar libro en formato .zip
en la Biblioteca de UPASIKA. |
|
|
|
|
|
|
"Krishnamurti
con Estudiosos Budistas"
"En
la atención no hay división"
"Si uno atiende con los oídos,
los ojos, el cuerpo, los nervios,
¿qué sucede?".
1979 Brockwood Park England.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Jiddu Krishnamurti
y C.W. Leadbeater.
en seaunaluzparaustedmismo
|
|
Jiddu
Krishnamurti y
"El Misterio".
en seaunaluzparaustedmismo
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|